Porque abandonar la mejora continua

Sí, es posible que llegue una hora que usted quiera abandonar la mejora continua. Y sí, ese es un caso real que voy a contar: También he decidido abandonar la bendita mejora continua.

Antes, quiero reafirmar que la mejora continua es muy buena, muy importante y puede ser muy eficaz para diversos casos. Sin embargo, tiene horas, que ya no es suficiente. Y eso depende básicamente de lo que quieres.

Hace muchos años estamos mejorando nuestros procesos y evolucionando en varios aspectos. En una determinada área, nuestros procesos presentan indicadores de crecimiento de más de 30% al año, por varios años. Esto dibuja un patrón, de mejora implantado que tiene garantizando un 30% de crecimiento.

Usted puede pensar: “Caramba, ¿no está bien el 30%?”
Y la respuesta es: ¡Depende de lo que quieres!
Sucede que sé que podemos crecer 70, 80 hasta el 100% al año. La mejora continua nos coloca en una marcha, y yo deseo otra.
Podemos intentar “mejorar más”, siempre podemos, y no está equivocado, pero aquí decidí abandonar la mejora y optar por otra estrategia más incisiva. En una conversación con un amigo, me dijo:

“Ve lo siguiente, ustedes están en un ritmo de mejora, necesitan un salto”

Tiene sentido, podemos seguir mejorando, pero para crecer el 100% voy a llevar 3 años, y creo que podemos lograrlo en 1, como máximo un año y medio. Pero para eso, vamos a tener que dejar de hacer las cosas de la forma en que hacemos e inventar una nueva manera, romper con nuestros métodos actuales, y crear nuevos.

No vamos a mejorar, ¡vamos a promover una ruptura!
Sí, da mucho miedo.

¿Y cómo hacer eso?

Por supuesto, no vamos a empezar mañana a hacer algo diferente, en realidad, la solución ya ha sido muy debatida por aquí, tenemos varios indicios de lo que podemos cambiar, pero falta una virtud: CORAJE.

Ahora es el momento de dejar algunas cosas más claras, principalmente DONDE VAMOS LLEGAR, cuál es el número a ser perseguido, no es el 30%, es algo mucho mayor, el 70% tal vez el 80%. NUESTRA HIPÓTESIS es: vamos a dar un gran salto y, para eso, necesitamos cambiar varias cosas, entonces empezamos la planificación. Sabemos de los desafíos, incluso de algunos problemas que vamos a tener, pero vamos a encarar de frente, ¡y NOS VAMOS PREPARAR para eso! No es porque sea una ruptura necesita ser desorganizada.

Hemos traído especialistas para ayudarnos, COMPETENCIAS DE FUERA pueden contribuir. Después de todo queremos cambiar absolutamente todo, y eso es nuevo para nosotros. Necesitamos ENVOLVER TODO EL TIME, y validar con la dirección: tendremos algunas turbulencias, pero sabemos que el destino compensa.

Tenemos que abandonar la parálisis y partir para la acción, sobre todo aceptar que vamos a tener que dejar de hacer, algunas cosas, para realizar ALGO NUEVO
En fin, necesitamos saber que NO VA A SER FÁCIL!

¿Existen riesgos?

Hay muchos riesgos por todas partes. El principal es el de la no adecuación del equipo. Sabemos hacer de una buena forma, que funciona (después de todo, crecimos más del 30% al año) y ahora vamos a abandonar eso. Algunas personas pueden no adaptarse.

Otro riesgo es nuestra hipótesis estar equivocada y el 30% ser nuestro límite. Y con eso, vamos a comprometer un año (en el mejor de los casos, 6 meses) de trabajo. Por supuesto que puede suceder.

Pero todos estos riesgos están en el radar , y atenuamos mucho cuando tenemos especialistas que nos apoyan y el equipo unido por el cambio.

Los beneficios

Cuando alcanzamos nuestro objetivo habremos dado un verdadero salto, y eso es mucho mejor que mejorar.

Otro beneficio es un NUEVO DESAFIO a ser superado, y él viene junto al cambio, tan amado y a la vez odiado. A todos nos gusta nuestra zona de confort, pero un proyecto como este va a sacar a todo el mundo de la suya y eso es maravilloso.

Es aquel frío en la barriga, un paso en el camino de algo nuevo. Es la excitación que lo desconocido promueve y la certeza de que es una pelea de las buenas para luchar.

Por último, la UNIÓN DEL EQUIPO involucrado en hacer algo fuera de lo común. Sé que todos quieren superarse, y este será un proyecto para eso.

¿Y será qué va a tener éxito? ¡Creo que sí!

Por supuesto que esperamos tener éxito en lo que vamos a hacer, nunca abrimos un proyecto de esos para el fracaso.

Tengo buena convicción del éxito, y sé de los desafíos, pero conozco a los involucrados y sé que tenemos habilidades para ajustar el proyecto durante su curso, si se sale algo fuera de lo planeado.

Entonces, ¿La mejora continua no sirve para nada?

Nunca he dicho eso, ni lo voy a decir. ¡Ella es sensacional! Incluso, fue ella la que nos trajo hasta donde llegamos hoy; fue ella la que nos permitió vislumbrar la hipótesis de un salto mayor, ¡de una ruptura!

Y digo más: tan pronto como este proyecto funcione, voy a trabajar mucho para implantar la mejora continua nuevamente, ¡ahora creciendo el indicador por encima del 60%!

Pero algo me dice que, algún tiempo después, vamos a buscar nuevos saltos. 😉